FAST & FURIOUS X: La saga se agota
Fast & Furious llega a la X entrega. Tremendo. O bueno, no tanto si pensamos que ahora la industria de Hollywood vive de remakes, sagas, franquicias y… eso, básicamente de ofrecer lo mismo una y otra vez. Fuegos artificiales, efectos especiales y, en el caso de la presente, actores cachas. Y déjate de guión que eso da igual. Lo importante es que haya mucha acción y que estén los actores de la ‘familia’, la de Dominic Toretto (Vin Diesel): Michelle Rodríguez, Jordana Brewster, Tyrese Gibson, John Cena… rostros conocidos de la saga que nos hagan disfrutar con sus presencias. Y ya. Pero eso no es una película, es un vídeo casero con estrellas que cobran mucho dinero.

Fast & Furious X es básicamente eso. Sumado al malo de turno, claro. En este caso, el hijo del capo de las drogas Hernán Reyes, Dante (Jason Momoa), un Jason Momoa desatado que hace locuras, como soltar una bomba gigantesca por Roma con la que pretende volar el Vaticano. Eso es sólo un segmento de la película, pero tiene tanto sentido como el resto de las cosas que pasan en ella. Un guión loquísimo sin pies ni cabeza para lucimiento de Momoa en modo Joker… o ya le gustaría, porque en realidad lo que resulta de su intento no es más que una caricatura de lo que pretende. Y agotadora. Una caricatura agotadora y sin gracia.
Tal vez es que Fast & Furious está agotada. Era una saga simpática que mezclaba a James Bond con Misión Imposible y resultaba divertida pero esta entrega ha perdido la diversión por completo. Se hace larga y aburrida porque no tiene nada que contar, solo ofrece rostros conocidos y algún cameo igual de famoso que ellos.
Ni siguiera hay efectos visuales notables. Las explosiones son de pacotilla, de CGI sin batería en el ordenador, efectos visuales de saldo. En Fast & Furious X no hay nada destacable. Ni siquiera la escena entre créditos, esa en la que siempre otro cachas hace un cameo adicional. Por supuesto, no os diremos de quién se trata, pero no merece la pena ver la entrega para averiguarlo. Lo mejor que podéis hacer para homenajear a una saga que nos ha dado entregas espléndidas, bien hechas y muy entretenidas, es que os pongáis en casa alguna de ellas, porque la X baja el nivel de manera notable. Y habrá más, eso es evidente. Mientras sigan funcionando seguirá habiendo Fast & Furious. Hasta que el público diga basta.
Silvia García Jerez