UN ASUNTO DE FAMILIA: Estremecedora Palma de Oro
Un asunto de familia es la nueva película de un maestro, Hirokau Koreeda, director japonés que se dio a conocer en todo el mundo cuando en el año 2004 presentó en el festival de Cannes Nadie sabe, con la que logró el premio al mejor actor y el título extraoficial de genio de la cinematografía contemporánea.
Como dicho genio, Koreeda fue agigantando su leyenda cuando luego estrenó títulos que ya son hitos para todo cinéfilo, Still Walking, De tal padre, tal hijo o Después de la tormenta. El año pasado, sin ir más lejos, nos llegaba El tercer asesinato, un thriller que sacaba al maestro del cine social que oficialmente rueda.
Ahora, a finales de 2018, aterriza en nuestras carteleras su última joya, Un asunto de familia, que obtuvo en el pasado festival de Cannes, en mayo, la codiciada Palma de Oro, el premio más importante que una película puede ganar en un festival, sobre todo porque el de Cannes es el certamen de certámenes, el más grande de todos cuantos se desarrollan a lo largo del año. Si la Palma de Oro es tuya, puedes considerarte el rey del mundo.
Hirokazu Koreeda la ganó con Un asunto de familia y, una vez vista, se entiende que el jurado, presidido por la actriz Cate Blanchett, se rindiera a ella. Porque es bella, es hipnótica, es absorbente, es trágica, pero por encima de todo es puro cine.
Un asunto de familia, Shophlifters en su título inglés para el mercado internacional, es decir, Ladrones de tiendas en nuestro idioma, aunque tan adecuado resulta ese como el que tenemos nosotros, todo sea dicho, comienza con un padre y su hijo llevando a cabo uno de los robos que suelen cometer siempre en la misma tienda, con el mismo ritual de por medio y el mismo modus operandi.
Padre e hijo, una vez cometida la fechoría, se encuentran con una niña sola en la calle y deciden llevársela a casa. Tiene 5 años, les dice con su manita. Apenas aúna fuerzas para hablar, del miedo que la inunda. La pequeña Yuri, irán descubriendo, se ha escapado de una casa en la que los malos tratos eran su día a día.
La familia que la acoge, que en principio no sabe si hacerlo pero que luego ve que es lo mejor para ella, se plantea que lo que estén llevando a cabo sea un secuestro, pero ellos no han pedido rescate, ni la están maltratando, ni, de momento, parece que nadie la reclame. Así que, sigamos adelante, que con nosotros está estupendamente.
Ese nosotros es una familia en la que abunda el amor, la ayuda y la comprensión, pero también está llena de secretos, que saldrán a la luz en el momento en el que un acontecimiento inesperado haga que todo se desmorone.
Koreeda logra con Un asunto de familia un auténtico monumento. Desde el primer instante ya nos atrapa con planos perfectamente calculados, con encuadres que abarcan a los personajes que necesita para contar lo que está ocurriendo. Más adelante, además de con la técnica y la tensión que le imprime a la acción, nos aportará una emotividad que hará que la película no solo roce sino que sobrepase la perfección.
Koreeda nos sumerge de lleno en esa familia. Vamos a conocer sus costumbres, los lazos que la atan, los trabajos que tienen y su complejo universo, en cuya aura ya se nos dice, antes de que lo hagan sus diálogos, que algo turbio nos espera en el metraje.
De nuevo en Un asunto de familia, como ya ocurriera en Roma, de Alfonso Cuarón, la secuencia de la playa se torna determinante. No solo nos da la pista de la clave de la cinta sino que nos derrite con la planificación familiar que muestra. La belleza de esa escena es sobrecogedora y entendemos, con solo asistir a su desarrollo, que no es fácil conseguir un nivel cinematográfico tan completo.
Todos los personajes de Un asunto de familia son inolvidables. Esa abuela maravillosa, interpretada por Kirin Kiri, como cúspide de un organigrama en el que cada uno tiene su función y sabe cumplirla. Y por supuesto, la niña, cuyo nombre real es Miyu Sasaki, un ángel a la que no le va a quedar más remedio que aprender las costumbres del hogar. Donde fueres, haz lo que vieres, y ella, con los años de los dedos de una mano, comienza su carrera delictiva. A veces que te acojan también tiene sus desventajas.
Un asunto de familia ha sido preseleccionada al Oscar. Está en la lista de las 9 nueve películas que el 22 de enero quedarán en las nominadas al premio. Koreeda no podrá faltar. Su película es de las que cuentan con nivel para darle prestigio al premio al que aspire. El que sea. Roma y Cold War se lo van a poner difícil, pero pase lo que pase Koreeda ya ha ganado. Porque esta película ya es historia del cine y hacer historia es siempre la mayor recompensa.
Silvia García Jerez