LOS EXTRAÑOS: Capítulo 1 – Los enmascarados se tornan trilogía
Los extraños. Los conocimos en el año 2008, en una película de terror protagonizada por Liv Tyler en la que tres enmascarados se infiltran en la casa de campo en la que su personaje y el de Scott Speedman, su pareja en el film, deciden pasar una velada tras asistir a la boda de una amiga. La casa está completamente aislada, algo fabuloso si quieres tener una intimidad romántica sin interrupciones pero nada bueno si tres personas a las que no les puedes ver la cara se meten en ella a acosaros sin piedad con la evidente intención de mataros.
Diez años después, Los extraños: Cacería nocturna nos volvía a traer al mismo trío inquietante de personas con caretas encima, o con un saco en el caso de uno de los acosadores, y de nuevo nos hacían pasar un muy mal rato.
Ahora, de manos de Renny Harlin, responsable de Máximo riesgo o La jungla 2: Alerta roja, Los extraños regresan… convertidos en una trilogía. Ésta que se estrena el 12 de julio es el Capítulo 1, pero es que Harlin tiene ya en postproducción los dos restantes.
Como en las entregas anteriores de Los extraños, la nueva comienza con una silueta… es todo lo que se ve de ella cuando los inquilinos abren la puerta tras su llamada a las tantas de la madrugada, y tras un prolongado silencio pregunta siempre por la misma persona. En todas las películas de Los extraños la invasión arranca con un ‘¿Está Tamara?’, y su posterior respuesta negativa. ‘Se ha equivocado de casa.’
Pero Los extraños no se irán. Volverán y preguntarán por Tamara de nuevo, dando lugar a la absoluta certeza de la pareja de estar ante un escenario terrorífico. La cacería ha comenzado. El asedio va a ser brutal. Ellos creen que pueden tener alguna escapatoria pero todas sus ideas van deviniendo en fracasos. Los extraños no se darán por vencidos y no cesarán en ningún momento su agobiante persecución a unos jóvenes cuya única intención era pasar la noche en esa casa aislada en el bosque después de haber tenido un percance con el coche en el pueblo más cercano y de haberlo tenido que dejar allí hasta que a la mañana siguiente se lo pudieran arreglar…
Los extraños. Capítulo 1 contiene todos los tópicos del género de terror que podamos imaginar. Lo sabemos, ya conocemos la historia, la hemos visto en dos ocasiones anteriores, y siempre nos fascina la manera en que la pobre pareja es perseguida. La tensión con la que se muestra el acoso siempre ha sido muy efectiva, tanto si sólo el espectador sabe que detrás del personaje hay un asesino enmascarado como si también el personaje es consciente de ello. Porque su mera presencia es inquietante.
Y sabemos que en sus primeras apariciones no van a hacer nada, sólo presentarse. Entre comillas. Que la presión sobre los inquilinos irá aumentando y que en algún momento el acoso se volverá más grande. Pero asistir a ese proceso, a esa narrativa, siempre ha funcionado con esta historia. Y con Renny Harlin ahora a los mandos de la misma vuelve a ser así. Parece que no pasa nada pero están pasando cosas, estás cada vez más tenso como espectador y los enmascarados cada vez más en su salsa, disfrutando de ser los villanos de la función.
Los extraños. Capítulo 1 es una home invasion de manual, pero con una efectividad asombrosa. Tenemos claro los pasos que va a dar el guión, pero no podemos despegar los ojos de la pantalla, y eso es un piropo para los responsables de haber logrado una hazaña semejante. Es una película muy entretenida que no aporta nada a lo ya visto previamente pero no importa: da lo que promete, aquello que sabemos que vamos a ver. Y lo da bien, con las dosis de tensión y angustia que requiere la atmósfera en la que se desarrolla. Si las dos restantes son igual de efectivas tendremos de nuevo de vuelta al Renny Harlin que tanto nos gustó hace décadas.
Silvia García Jerez