NOVEMBRE: Descender al abismo
Novembre significa Noviembre en francés. No es que esté mal escrito en español, simplemente no es español. Y Novembre se titula así porque nos va a llevar al corazón de la investigación que los servicios antiterroristas franceses llevaron a cabo después del 13 del mes correspondiente del año 2015, cuando tuvieron lugar los atentados que conmocionaron París. Cinco días en los que, sin descanso, la brigada dirigida por Fred (Jean Dujardin), atiende todos los frentes posibles: llamadas de teléfono, chivatazos, pistas falsas o reales, interrogatorios, persecuciones, seguimiento por internet… todos los elementos con los que cuentan son válidos para intentar atrapar a los culpables.
El cine, cuando refleja hechos reales, siempre es atractivo, y en este caso hablamos de un suceso terrible que ha dado lugar a películas como la española Un año, una noche, o la también francesa Memorias de París, con Virginie Efira como protagonista, y ganadora del César a la mejor actriz en la misma gala en la que Novembre perdió los 7 a los que optaba, entre ellos mejor película, director y actor protagonista.
Y es una pena que no ganara nada, alguno se merecía, porque es una película espléndida, y un thiller, igual que el ganó, La noche del 12, llegada directamente a la plataforma filmin en nuestro país. Pero solo puede vencer una y no fue Novembre. En cualquier caso, sigue siendo inmensa, absorbente, y muy brillante.
Novembre logra meternos de lleno en esa brigada que tan intensamente trabaja y nos deja ver sus errores y sus aciertos, sus pesquisas, su modo de actuar, que no es sencillo y menos aún cuando has de ocuparte de algo tan delicado y peligroso. Un descenso a los infiernos asomándose al abismo de un caso oscuro del que ningún servicio policial querría ocuparse por muy eficaz que suela ser.
Jean Dujardin, aquel actor que ganó, un poco sorpresivamente, el Oscar al mejor actor por The Artist, en este film, del que podría decirse que es incluso secundario porque el reparto es muy coral, está fabuloso. No mejor que en aquella porque son registros completamente distintos, pero igual de sensacionales. Es un buen actor, Dujardin, capaz de moverse tanto en el cine norteamericano como en el francés, ya que, recordemos, lo hemos visto en Monuments Men, o en El lobo de Wall Street; en la estupenda El oficial y el espía, de Roman Polanski, y en la fabulosa La chaqueta de piel de ciervo, de Quentin Dupieux. Nada se le resiste, ni siquiera la publicidad de Nespresso, al lado de George Clooney, quien lo dirigió en la ya citada, infravalorada y magnífica, Monuments Men.
Novembre es un puzzle que hay que armar si se quiere llegar al fondo de la investigación. Un arduo proceso del que la película solo nos cuenta unos días pero que fue más largo y laborioso, incluso de años. En estos casos nada es fácil pero Novembre cuenta lo sucedido con la garra de un thriller norteamericano de primer nivel, de esos que desde el comienzo te tienen pegado a la butaca y no te sueltan, de esos que merece la pena recordar y recomendar. Novembre es una gran película.
Silvia García Jerez