LOS SÚPER ELFKINS: Acción y aventuras para los más pequeños
Los más pequeños de la casa están de enhorabuena: Los súper Elfkins llegan a las salas de cine españolas para ofrecerles la diversión que estaban esperando. Sí, no es fácil, aunque no lo parezca, que una película de animación esté verdaderamente destinada al público infantil. Nos hemos acostumbrado a que Disney y Pixar, las dos grandes productoras de este género dentro de la industria, nos den títulos que bien mirados suelen ser estar más enfocados para los adultos que para los niños, con temáticas que llegan mejor a los primeros que a los segundos, y hemos normalizado que intrincadas tramas y personajes con complicaciones personales sean del interés de pequeños espectadores que están empezando a serlo simplemente porque están representados en dibujos animados. Por ordenador, pero dibujos animados al fin y al cabo. Y no nos engañemos, los niños más pequeños buscan otras cosas, aunque sus padres no lo admitan porque ellos son los primeros en disfrutarlas.
Para ellos, para aquellos peques que están empezando a ver películas, capítulos de series de animación, historias adaptadas al tiempo que pueden prestar atención mientras aprenden a ver metrajes de mayor duración, llega Los súper Elfkins, animación alemana que sí tiene en cuenta a la audiencia que comienza a serlo, con una historia sencilla, con personajes bonitos diseñados para despertar su imaginación y mensajes fáciles de comprender. Entre ellos uno que la película recalca especialmente: hay que ayudar a los demás. Porque en el ADN de los Elfkins está, precisamente, el querer ayudar a quien lo necesite, ya sea un niño, un perro o una rata. No hay que hacer distinciones a la hora de prestar nuestra colaboración.
Los Elfkins, recordémoslo, eran aquellos duendecillos a los que ya conocimos en 2019 en Los Elfkins y, por lo tanto, son seres que se supone que no existen, así que tienen que permanecer ocultos a la vista de los humanos y operar sin que sean descubiertos. Cuando Elfie, la protagonista de esta historia, se hace amiga de Bo, un niño solitario que pertenece a otro clan, descubre la existencia de una rencilla de 250 años con ellos. Pero lejos de mantenerla quiere unirse a su nuevo amigo para llevar a cabo acciones tan peligrosas como divertidas, que realizan gracias a que son una unidad de élite en la tecnología, para ayudar a los demás a conseguir aquello que no pueden lograr por sí mismos. Si una niña quiere una mascota, por qué no facilitarle el tener a un perrito perdido. Los súper Elfkins están para servir, aunque la Policía local esté dispuesta a pararles los pies demostrando que no son una invención popular, sino que existen de verdad y que son un peligro para la sociedad.
El argumento, como vemos, es de lo más sencillo. Y aún así, además de los más pequeños la pueden disfrutar los papás, aunque teniendo claro que está hecha para una audiencia que requiere un guión acorde a su edad. También los niños muy pequeños tienen derecho a que se hagan películas para ellos, pero no todas las productoras están dispuestas a ofrecérselos.
Lo cierto es que Los súper Elfkins es una película trepidante, llena de acción y de humor, y también, por qué no decirlo, de muchas travesuras. Los duendecillos, para alimentarse, se van haciendo con comida que no les pertenece en un contexto de comedia loca en la que los tenderos no salen bien parados y sus reacciones son todo lo cómicas que se espera de esas situaciones… que la película ya muestra, en los gestos contrariados de quienes salen perjudicados, que no deben hacerse por muy bien que les salga a los personajes y por muy divertidas que resulten ser en la ficción. También eso lo han de aprender los niños. Y los adultos… recordarlo.
Pero sobre todo, Los súper Elfkins es una película familiar llena de momentos bonitos y emotivos. Y de acción, no lo olvidemos. El tramo central en el que Elfie quiere demostrar a sus nuevos amigos que puede ser tan buena como ellos es apasionante. Digno de la mejor entrega de Missión: Impossible. Y la media hora final es un despliegue de adrenalina al máximo nivel. La película en su conjunto supone una hora y diez minutos de buen cine capaz de enganchar a la audiencia más exigente.
Los súper Elfkins es un entretenimiento veraniego de primer orden y un primer puntal para que los niños más pequeños de la casa vayan tomando contacto con el cine en las salas oscuras, que ofrecen una experiencia muy distinta al hecho de ver películas en casa. Duendes, humanos, perros, diversión… Los súper Elfkins lo tiene todo para ser la favorita de los peques en sus vacaciones estivales. Y para hacer las delicias de sus papis.
Silvia García Jerez
