LO QUE QUEDA DE TI: Duelo en el campo

Lo que queda de ti es, aparentemente, otra de esas películas cuya acción se desarrolla en el campo, de esas que ya llevamos mucho tiempo como estándar de narrativa en nuestro cine, pero ni se trata de una más ni es tan aburrida como tantas otras. De hecho, es incluso apasionante.

Lo que queda de ti es la ópera prima de Gala Gracia, que tiene a su espalda varios cortos y una enorme trayectoria como ayudante de casting, es decir, de esas personas que se se dedican a elegir a los actores ideales para los papeles que los guionistas escriben. Un trabajo, por cierto, que no es fácil de hacer, aunque lo parezca, aunque muchas veces cueste darse cuenta de que un actor está mal elegido y no da la talla para un papel que se adivina brillante bajo la impasividad o el histrionismo de quien lo interpreta.

Aquí, en Lo que queda de ti, nos presenta a dos hermanas, Sara (Laia Manzanares) y Elena (Ángela Cervantes), que acaban de perder a su padre en un accidente, un hombre de campo que sabía cómo llevar la pesada carga que supone ocuparse de las reses y los rebaños, o de las ventas y el marketing de productos de la tierra. Ahora es el turno de que pase a sus hijas, pero Elena, que lleva viviendo toda la vida allí, sabe también hasta qué punto puede ella llegar con todo sin la ayuda de su progenitor.

En cambio, Sara vivía en Nueva York trabajando en una incipiente carrera como pianista de jazz cuando recibe la noticia de la muerte de su padre y vuelve al pueblo para enterrar sus cenizas con su hermana. Pero Sara no sabe nada de campo, o lo que supo ya lo olvidó. No es ninguna ayuda para Elena y la tensión entre las dos hermanas es evidente. Porque Sara pretende mantener vivo el recuerdo de su padre en todo lo que queda de él en la tierra que trabajó, mientras que Elena, consciente de que el campo tiene sus limitaciones para un ser humano y que no se puede estar al rebaño y a todo lo demás, quiere pasar página lo antes posible vendiendo cuanto supone un esfuerzo de más, porque uno da para lo que da.

Las tiranteces entre las dos aumentan y el ambiente, por muy al aire libre que estén, se torna irrespirable. Sara tiene que tomar una decisión y lo tiene que hacer cuanto antes. Volver a Nueva York y regresar a la prometedora carrera que allí le espera o quedarse en sus raíces y asumir que su vida siempre fue ésta.

Lo que queda de ti es un retrato certero y humano de la dicotomía a la que nos somete el mundo moderno. El ser humano desde hace décadas, desde que las ciudades ofrecen oportunidades suculentas a quienes nacieron en el campo, desde la revolución industrial tal vez, y mucho más ahora, ha conocido un éxodo que lo ha llevado a aumentar su nivel de vida, alejado de un panorama necesario como es el trabajo en el campo, pero sacrificado hasta la extenuación. Muchos han elegido cambiar el pueblo por la ciudad, aumentando el porcentaje de lo que actualmente se denomina la España vaciada. Incluso hay pueblos que han sufrido tanta emigración a la ciudad que se han vaciado hasta quedarse en no más de diez habitantes. Por supuesto, los médicos ni los visitan, han de ir ellos a las poblaciones más cercanas. Es un auténtico drama.

La joven actriz Laia Manzanares es la protagonista de la película
La joven actriz Laia Manzanares es la protagonista de la película

Lo que queda de ti no llega a contarnos eso pero sí nos expone hasta qué punto la dicotomía entre quienes se quedan y quienes se van se vuelve dura y afecta a la convivencia. Porque el campo parece divertido pero no lo es, no es siempre hacer un picnic y regresar al chalet con piscina. El campo requiere mucho esfuerzo, mucho sacrificio, y no todo el mundo está preparado para llevarlo a cabo. Aunque lo intentes. Sara lo intenta porque es lo que toca y porque quiere preservar el legado de su padre, pero las cosas no son tan fáciles como piensa. El día a día, la vida real se impone. Y qué bien lo cuenta Gala Gracia, con qué tacto y con cuánta sabiduría tras la cámara.

Lo que queda de ti llega a nuestras pantallas tras cosechar buenas críticas en el pasado festival de Málaga, en el que Ángela Cervantes fue premiada como mejor actriz por La furia, pero hasta la lectura del palmarés no se supo si podría haber estado presente en él por su trabajo aquí. En las dos está estupenda, derrochando talento y carisma, pero en La furia brilla con más intensidad. Su Elena es secundaria y no cuenta con las mismas capas que la Alexandra que le dio la Biznaga de Plata. Elena es una mujer de campo que no piensa en otra vida. Tiene su pasado, su presente y su futuro armado y sólo necesita que la dejen trabajar. El conflicto con su hermana es evidente pero la incomunicación con ella, debido a la indignación, hace que su papel no se alague más de lo estrictamente necesario, porque quien debe solucionar su vida es Sara, no ella. También en eso el guión es inteligente.

Por eso el personaje de Sara es tan importante. Es la protagonista de la película y tiene un peso dramático a su espalda que requiere de una actriz con una entidad muy fuerte para encarnarlo. Laia Manzanares da la fragilidad que Sara demuestra a cada paso, pero falla a la hora de exponer las capas de la complejidad del personaje. Están ahí, en el guión, pero requiere de una actriz más sólida para hacerlas evidentes. Ángela Cervantes, en cambio, sí es perfecta para transformarse en Elena. Una actriz con la corpulencia de quien lleva toda la vida ocupándose de las ovejas y con la robustez interior de quien, conociendo el campo, busca resolver cuanto antes el trabajo diario.

Con todo y con eso, Lo que queda de ti es una película bellísima sobre el duelo y sobre cómo cada uno lo afronta, con su personalidad y su forma de ser y de enfrentarse a la muerte. Tiene lugar en el campo pero podría haber estado ambientada en una ciudad con dos hermanas con vidas diferentes. La cuestión es cómo cada una de ellas asume un presente inesperado y lo afronta de cara al futuro. Y a ese respecto la película es intachable. De hecho, Lo que queda de ti es una de las películas más recomendables de la cartelera.

Silvia García Jerez

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *