LEO & LOU: Aventuras para todos los públicos
Qué pocas películas se hacen como Leo & Lou y cuánto se agradece cuando nos topamos con una: divertida, sin humor soez, para toda la familia -de verdad, no de esas en las que sólo lo pasan bien los niños-, entrañable, repleta de aventuras y con un corazón tan grande que no cabe en la pantalla.
Leo & Lou van a ser compañeros de viaje en esta road movie en la que Leo (Julia Sulleiro) es una niña gallega de 10 años, huérfana, que se escapa del orfanato en el que está con la intención de ir a un pueblo de la costa para participar en una competición de pesca. Pero a su corta edad no sabe bien cómo llegar allí, así que hace autostop y casualmente el coche de Lou (Isak Férriz) pasa por delante de ella. Y claro, se detiene. Le pregunta qué hace allí, en medio de la intensa lluvia… pero Leo no habla. No desde la muerte de sus padres en un accidente. Escribe lo básico en un cuaderno pero se comunica en lengua de signos porque su cuidadora (Maggie Civantos) se empeñó en que pudiera hablar de alguna manera fluida en el mundo. Y ella también aprendió el idioma con la niña, por lo que se dispone a buscarla junto a la agente de policía que se está ocupando del caso (María Pujalte). Dos personajes yendo hacia la costa, aunque Lou piensa que está llevando a Lou a su casa, y otros dos intentando encontrar a los primeros.
Leo & Lou es un viaje físico pero también emocional, un viaje hacia la comprensión del otro, sobre todo del cascarrabias de Lou hacia la, en el fondo, simpatiquísima Leo. Un tipo especialista en meterse en líos que se encuentra, sin saberlo y sin quererlo, en el más grande y más bonito de todos hasta la fecha. Porque estar con Leo es una aventura constante, y es que la niña sabe lo que quiere y está dispuesta a hacer lo que sea para lograrlo. Y lo hace de una forma muy divertida, como en esas películas de acción real de Disney de los años 60, en la que los niños eran protagonistas de locuras varias de las que siempre se obtenía un aprendizaje positivo y muy sano. Hoy llamamos a ese tipo de cine ‘cine de valores’. También es admisible si nos da una pista de qué tipo de película amable que transmita solidaridad, empatía y respeto hacia el otro vamos a encontrarnos en la sala.
La ópera prima de Carlos Solano nos sumerge en un mar de todo eso, coronado por una total accesibilidad para el público con diversidad. Personas sordas pueden acercarse a la sala porque Leo & Lou, aunque sea una película española, está completamente subtitulada. Leo se comunica en lengua de signos y todo el metraje cuenta con subtítulos para sordos, no únicamente para oyentes, como en las cintas rodadas en idiomas que no sean castellano. Subtítulos con colores que distinguen personajes protagonistas y secundarios y audiodescripción para que puedan saber qué sonidos se oyen fuera del campo de la pantalla. Como sucedía con Sorda, de Eva Libertad, y como no sucede con ninguna película española o hispana por mucho que el público sordo pida títulos accesibles en los cines para no tener que estar esperando a que lleguen a las plataformas para poder verlos. Leo & Lou la pueden ver desde el mismo día de su estreno comercial.
A Leo la interpreta la debutante Julia Sulleiro, una niña que aprendió lengua de signos y que signa maravillosamente en la película. Todo lo que signa es real, es lengua de signos española, incluso en los momentos en que para acentuar lo perdido que está Lou a su lado no hay subtítulos que traduzcan a la pequeña. Pero también ahí Julia signa de verdad, y se le entiende muy bien si conoces la lengua de signos española. Es maravilloso encontrar una protagonista de tan corta edad que signe en la historia que narra sus peripecias para que otros niños sordos puedan sentir la empatía de ver reflejada su sordera en la pantalla. Y poder entender a un personaje que, en el cine, no en la calle o en las aulas, se comunica como ellos.
Y nos lo pasamos pipa viendo a Leo y a Lou discutiendo de esa manera tan divertida. Lou se desespera y Leo… las reacciones de Leo son desternillantes. Menudo carisma tiene Julia Sulleiro. Parece que no le cueste nada ser el alma de la fiesta, de esta fiesta que es la película que protagoniza.
Nosotros también nos lo pasamos muy bien, porque Leo & Lou es una gran película que debería ver toda la la familia. Viéndola no se va a aburrir nadie, es imposible. Carlos Solano ha concebido un producto de lo más brillante repleto de humor y acción, y con toneladas de ternura, porque los dos protagonistas son de esos para llevarse a casa. En el recuerdo, claro. Para querer seguir sabiendo de ellos, para no olvidarlos jamás.
De esos elementos -humor, acción, ternura- están confeccionadas las grandes películas, que no siempre están destinadas únicamente para el público adulto. Grandes películas hechas para grandes y pequeños. Esas joyas que cada vez escasean más pero que es un placer encontrar y recomendar.
Silvia García Jerez

