JURASSIC WORLD: EL REINO CAÍDO
Hace 25 años Steven Spielberg,
ese Señor director,
puso los cines patas arriba
al dar vida a un velociraptor.
Con efectos visuales increíbles
y gran dominio de la emoción
conseguía El Rey Midas
lo que muchos calificaron de peliculón.
Sam Neill, Laura Dern y Jeff Goldblum,
un trío para la Historia,
que junto a Richard Attemborough
lograron alcanzar la gloria.
Parque Jurásico se tituló el prodigio
que a la taquilla llenó de millones
y la Academia que da los Oscar
le otorgó hasta 3 galardones.
Otras películas le siguieron
para ir completando la saga,
cuatro cuentan ya los fans,
pocas, por muchas que se hagan.
Ahora llega la quinta,
Jurassic World: El Reino Caído,
a manos de un director español,
otro cerebro que se nos ha ido.
Juan Antonio Bayona, se llama,
responsable de El orfanato,
Un monstruo viene a verme
y Lo imposible, un tipo con olfato.
Quería trabajar con Spielberg,
ya puede decir que lo ha logrado:
como productor ejecutivo
el director de E.T. ha estado a su lado.
Pero el quipo español no acaba en Bayona:
también Belén Atienza como productora
u Óscar Fabra en la fotografía le dan al Jurásico
una entidad de nación locomotora.
Podemos ser el asombro del mundo,
en Hollywood lo hemos demostrado,
con Garci, Trueba, Penélope o Bardem,
que aplausos y alabanzas han cosechado.
Ahora le toca a este chico de Barcelona,
que cuenta con 3 Goyas en su haber
y una nominación al Oscar
que Naomi Watts mereció tener.
Poco a poco ganará premios de fuera,
de los grandes y suculentos,
su nombre en casa es el de un gigante
y en el extranjero despunta como portento.
En Jurassic World: El Reino caído
Bayona asombra con secuencias de acción,
enormes, de gran presupuesto,
pero les falta algo de emoción.
Es innegable la maravilla,
la capacidad de su realización,
travellings, la cámara girando,
bajo su supervisión.
El problema viene cuando
a pesar de tanta precisión,
no consigue involucrarnos
en una pretendida tensión.
Más allá de entretenernos,
y no es baladí la cuestión,
es una fórmula ya vista
en los cines y en nuestro salón.
Chris Pratt y Bryce Dallas Howard
repiten como protagonistas,
desde aquel Jurassic World
que masacraron incluso los optimistas.
Aquí los dos cumplen,
corriendo como jabatos,
aguantando lametones
de dinosaurios ingratos.
Jeff Goldblum regresa a este universo,
y Geraldine Chaplin también aparece,
grandes actores en un reparto
que con Bayona resplandece.
De este modo la franquicia
vuelve a la pantalla con nota,
la que le da el prestigioso director
al que sus amigos llaman Jota.
Silvia García Jerez