Hablamos con Luis Zahera, de La Uunidad, de este confinamiento y de sus personajes colegas
Luis Zahera lleva tiempo en la interpretación, aunque quizá su nombre se hizo realmente conocido al ganar el premio Goya por El reino, el pasado año. Es uno de los actores gallegos más famosos, y de los mejores, que suele aparecer coqueto y esmerado, como entonando siempre esa chispa de su personalísimo acento gallego que nunca ha evitado, ni parece que le hayan pedido cambiar.
Junto a esa estampa que igual vale para un marinero que un traficante, un amante que un cura, Zahera siempre consigue transmitir naturalidad en cada uno de sus personajes, aportándoles además una humanidad que los hace encantadores, deseando que sean colegas tuyos. .
En La Unidad es Sergio, pero le llaman El alemán y no por su acento. Quizás sea por su dureza de sargento de hierro. Algo chulesco en la indumentaria pero regio, serio y académico en las maneras de mando, se encarga de coordinar los equipos de vigilancia y operaciones. No tolera ningún error, porque sus chicos no fallan. Es Jefe de la Unidad de Operaciones y su profesión parece ser toda su vida, siendo uno de los agentes de La Unidad del que más apetece saber fuera del trabajo. Será por esa tonada melancólica al expresarse, o puede que por las meigas…
Pero en cuanto Luis Zahera comienza a hablar, no se puede evitar sonreír.
LA CRONOSFERA: Qué lástima no encontrarnos cara a cara. ¿Dónde estás de aislamiento? ¿Cómo llevas el confinamiento?
LUIS ZAHERA: Tengo una casa con verde y con la playita a metros de la casa. Entonces, pues no me puedo quejar. Se lleva bastante bien, te lo puedo asegurar.
L. C.: Creo que estuviste es un tiempo siguiendo el trabajo de un grupo especial antiterrorista. ¿Como fue aquello, te fijaste sólo en un agente o en detalles de varios?
LUIS ZAHERA: Para ser sincero contigo, soy muy, muy, muy amigo del director. Entonces, pues ya empecé a saber de la serie desde la preproducción. Y efectivamente, conocimos al grupo y al personaje al que interpreto, que le caí mínimamente bien, o le caí en gracia. Y me fui con él cinco días a su casa. Con lo cual, recabé muchísima información -que te da muchísima seguridad-, empatía y muchas expresiones técnicas del propio trabajo… Cinco días, pues, ¡imagínate! Hubo muy buenas charlas y me siento un privilegiado de haber conocido todo el proceso, y de haber convivido con esta persona que me dio tanta seguridad para interpretarlo.
L. C.: ¿Sabes si ha visto ya la serie?
LUIS ZAHERA: Creo que no, que quería esperar. Prefería verla, una vez se estrene. Creo que determinados mandos de la Comisaría General de Información ya la tienen, gente que ya la vio, pero él puntualmente prefirió esperar a sus tiempos, sus cosas…
L. C.: Llevas mucho tiempo haciendo todo tipo de tipos. Últimamente te hemos visto de gánster y ahora de policía. Hay algo en todos tus personajes que les une, más allá de esa naturalidad que imprimes, les otorgas humanidad y una termina queriendo ser colega de todos tus personajes, por muy amorales que sean. ¿Eres consciente, o es una costumbre que trabajas?
LUIS ZAHERA: (se ríe) Te lo agradezco muchísimo. Y sinceramente esto que me comentas comenzó con la serie de Telecinco, Vivir sin permiso. Yo no veo mis trabajos porque no me aportan nada y no me gusta. Pero entonces, empecé a notar que cuando la gente veía los capítulos, luego me comentaba esto que me estás diciendo, lo de la humanidad, pero ¡qué coño de humanidad en un tipo que vende toneladas de cocaína y ejecuta peña! (ríe) Pero sí, debe haber ahí un componente… Son cosas bonitas lo que te dicen y como no lo pretendías, pues algo debe ocurrir. Me llama la atención. Y me agrada mucho pues no soy muy consciente.
L. C.: Algo parecido ocurre con la estética. En tus personajes suele resultarme re-marcada, muy pensada para cada papel, para bien. Y no sé si surge de ti, o es de casualidad y viene por guión. Creo que eres coqueto y se te ve cómodo en el estilillo. Como en La Unidad, ya sea en la comisaría o cuando estás en casa con tus gafas, en camiseta y jugando con esos maravillosos perros. Todo muy peculiar y aún muy creíble para el personaje.
LUIS ZAHERA: Generalmente tengo en cuenta lo que dice el director, pero intento ponerme mucha ropa mía. Compro mucha ropa para posibles personajes y soy un poco friki en eso. Mis padres vendieron ropa toda la vida y siempre tengo un poco de obsesión con la estética; me fijo mucho. Y en el caso de Dani, él quería ese look aunque no es que lleva el policía real, al que conocí, que también es curioso. Pero a Dani no le gustaba y entonces, decidió esa estética setentera con ese pelo y esas gafas -que son mías- con ese tipo de cristales -que cambian de transparente en el interior a teñirse cuando afuera-. Ya te digo que el director es íntimo amigo mío y me dejó hacer lo que me dio la gana, aunque la premisa era suya. Pero sí que es cierto lo que dices; siempre intento vestirme, aunque antes, siempre está la gente de vestuario y a veces no tienes que aportar nada. No es que vaya de lo mío es mejor, pero sí que propongo y suelen comprármelo.
L. C.: ¿Qué escena de La Unidad te ha marcado, o recuerdas con más cariño?
LUIS ZAHERA: Pues esa misma de los perros. Cuando llego a mi casa con Michel, oon Marcos, quien se acaba de separar… Sí, quizás es la que más me gusta, porque las otras son más técnicas. Esta es la más humana. En las otras tienes el apoyo de la información, pero antes me quedo con las humanas, digamos.
L. C.: También estás genial en la secuencia con la niña, que igualmente es muy humanista.
LUIS ZAHERA: (ríe) Es cierto, también. Te agradezco. Pero como te decía soy de no verme. Como le pasa al maestro Peris-Mencheta, con quien he tenido esta conversación alguna vez y coincidimos en que no nos gusta nada vernos. Hacemos las cosas y jamás las vemos. Yo me pongo nerviosísimo y no me gusta la voz…
L: C:: Pero cómo puedes decir que no te gusta tu voz, ese acento gallego tan…
LUIS ZAHERA: Este acentazo gallego, que no me gusta. Pero al que debo mucho, bebo mucho y vivo mucho, como de lo que me dice el público.
L. C.: Hablando de acentos, Galicia se ha hecho visible en los últimos años y está muy presente en series y películas. No se si conoces Néboa de TVE con Nancho Novo, entre otros. Y no hace mucho que participaste en La playa de los ahogados del escritor gallego Domingo Villar.
¿Crees que lo gallego está viviendo un momento dulce?
LUIS ZAHERA: Es verdad. Era del productor, bueno, que la dirigió también… Gerardo Herrero, ¡ya me acuerdo!. Evidentemente hay un montón de actores gallegos -y actrices- que estamos ahí, un poco en el candelabro -como decía la otra- y se agradece mucho. Es un momento dulce para Galicia, sí. A ver ahora cómo reacciona toda la industria y Galicia en particular.
L. C.: ¿Y cómo ves el futuro de la Cultura pos Coronavirus?
LUIS ZAHERA: No me atrevo a decir. Esto es una cosa que vamos, no sabría decir. Supongo que lo primero es la salud. Cuando se pueda controlar esta situación desde el punto de vista sanitario, pues ahí ya entrarán los rodajes, los técnicos, el día a día de cantantes, mimos, coros… Esto es una rareza, una rareza suprema, y creo que hasta que no se conozca bien al animal… Además hay muchas cosas interrelacionadas que yo no manejo.
L. C.: ¿Te ha afectado laboralmente? ¿Tienes trabajos pendientes de estreno? ¿Algún proyecto cancelado?
LUIS ZAHERA: Soy un privilegiado. Tengo trabajo todos los jueves, colaborando en Land Rober Tunait Show, en la televisión de Galicia. Estamos todos los jueves -ahora con un equipo reducido- y hacemos sketches, monólogos y algunas tonterías para entretener un poco a los gallegos y gallegas. Con Roberto Vilar, que es un showman muy conocido y muy querido en Galicia. Por él se llama Land Rober, claro. Además tengo cosas pendientes para octubre, noviembre y diciembre, pues me dice mi representante que entonces se empezarán a mover. Pero pienso en ese niña o niño de 18 años que quiera arrancar en esto, y mira con lo que se encuentra… Soy muy afortunado porque ya tuve la suerte de mantenerme en esto, pero ahora es muy inestable todo y muy extraño. No sé. El otro día hicieron una entrevista a Rosa María Sardá -un referente para nosotros- y ella decía que esto lleva en crisis toda la vida, porque hace 40 años ya estaba en crisis, y hace 30 y hace 20. Y esta es una nueva crisis de la que saldremos. Así que quedémonos con la opinión de una auténtica sabia, que es La Sardá, y apliquémonos el cuento. Va a ser un cambio de época, pero nos adaptaremos. Así somos los humanos.
L. C.: Luis, muchísimas gracias. Queda decirte que tu personaje en La Unidad merecería un spin-off, pues dan ganas de saber más del tipo y sus perros.
LUIS ZAHERA: Te lo agradezco mucho. Y me lo apunto (y se ríe).
Mariló C. Calvo