SITGES Crónica 02
El regreso de la Bruja de Blair
Cuando nos enteramos que, después de tantos años, alguien retomaría la historia de aquel afamado filme low cost, El proyecto de la bruja de Blair (Estados Unidos, 1999), nuestra primera reacción fue de pavor, no por el origen terrorífico de la historia, sino porque recordamos una lamentable secuela que llevó por título: Blair With 2: el libro de las sombras (Estados Unidos, 2000), pero esta vez parecía que todo iba a ser muy diferente.
Ahora Lionsgate preparaba sigilosamente un proyecto que originalmente llevaba por título El bosque, y que finalmente y como la secuela, de cierta forma, oficial de la primera, terminó por llamarse Blair Witch. Fue proyectada en el Auditori Meliá Sitges en una fría y lluviosa noche. El público, mayormente grandes fans de Blair Witch Project, se acomodaba en sus asiento esperando ver el esperado regreso de la bruja que había aterrorizado sus infancias o juventudes en el año de 1999. El resultado no fue el esperado.
Sería muy injusto criticar esta película poniendo como referencia a la primera que, en su momento, representó el regreso triunfal del found footage, o metraje encontrado, creado por el célebre Ruggero Deodato y su Holocausto caníbal (1980). La película de Daniel Myrick y Eduardo Sánchez es recordada por las asfixiantes atmósferas que propiciaban la angustia, la ansiedad y el terror psicológico de los personajes sin apenas ver nada, solo escuchar un par de cosas que podrían haberse magnificado por la sugestión.
Blair Witch cuenta la historia del hermano de una de las personas desaparecidas años atrás en el bosque de Burkittsville, Maryland (antes Blair) y que asegura que podría seguir con vida porque cree que la ha visto en un vídeo en Youtube.
Esta película no provoca, ni por asomo, la tensión ni la angustia de su antecesora; incluso tiene que valerse del recurso de la persecución y el posterior susto desde que los personajes se instalan en el bosque cuando en The Blair witch Project se valían del terror psicológico y del poder de la sugestión como recursos provocadores de tensión en el espectador
Además, resulta casi imprescindible ver la primera parte para poder entender la leyenda y la simbología de la bruja, el significado de los palitos atados a modo de vudú que la representan, la importancia de la casa, y las razones que tuvo para asesinar a sus víctimas. En la cinta actual se recurren a las escasas explicaciones que dan los personajes durante el día en lugar de crear expectativas en el público. Una pena.
Blair witch termina llenando las listas de películas de terror como una más, desperdiciando una oportunidad de rescatar y renovar un gran proyecto.
Por Karina Tiznado
