FURIOSA: DE LA SAGA MAD MAX – El universo continúa
Furiosa: De la saga Mad Max, que es el título que tiene la nueva entrega de este universo, que continúa la estela formulada por Mad Max: Furia en la carretera a nivel estético pero yendo al pasado de ésta para centrarse, a modo de spin-off, en el personaje de Furiosa, interpretado por Charlize Theron entonces y ahora por Anya Taylor-Joy en su etapa intermedia, antes de convertirse en la adulta que Theron representaba.
Pero en realidad Furiosa comienza con ella de niña (Alyla Browne), porque vamos a asistir a la infancia del personaje en el Lugar Verde de Muchas Madres. Allí viven quienes han sobrevivido a la devastación de la Tierra, seres privilegiados que, dentro de la nada restante que ha quedado, un planeta sin recursos, viven en ese Lugar teniendo más que otros, y las hordas de motoristas lideradas por Dementus (Chris Hemsworth) van a secuestrar a Furiosa para que su madre la intente rescatar y les diga dónde está ese Lugar. En caso de no hacerlo, la matarán.
Furiosa presencia el asesinato de su madre, tras el cual tendrá que quedarse con las hordas, no podrá volver al Lugar Verde pero aguardará hasta el momento en que pueda vengarse.
Furiosa, porque nadie la va a llamar con su título completo, que en realidad sólo sirve para situar el spin-off en la saga, es, aunque su director y creador del universo Mad Max, George Miller, no lo quiera, un más de lo mismo respecto a Furia en la carretera. Mucho desierto, persecuciones y una acción imparable para los seguidores de un título que nació en 1979 con Salvajes de autopista, protagonizada por un principiante Mel Gibson. De hecho, fue su primera película.
Y de la hora y media de aquella de 1979 a las dos horas y media de Furiosa. Incluso Mad Max: Furia en la carretera duraba media hora menos, dos en total. El evento cinematográfico que supone esta nueva entrega, nueve años después de que su predecesora, que en realidad es su continuación, fuera aclamada como una de las mejores películas de acción de la Historia, requería un metraje acorde con los tiempos y con la magnificencia que supone volver al hito rodado por un George Miller de más de 80 años.
Mucho mérito tiene que un director octogenario sea capaz de seguir dándole entregas a una saga tan moderna, pero lo cierto es que es únicamente para fans de la misma. Si no te gustó Furia en la carretera, no te acerques a ésta. Tiene algunas diferencias formales, como estar dividida en capítulos, cinco en concreto, o que no esté el famoso guitarrista de la película de 2015, que tantos aplausos recibió, pero en esencia no deja de ser un poco más de lo mismo: persecuciones en el desierto. Si te gustan, estupendo, si no, te vas a aburrir.
Furiosa la protagonizan dos estrellas del cine actual. Por un lado, Anya Taylor-Joy, una joven que ha ido subiendo en el star system de la industria en tres potentes momentos de su carrera: primero protagonizó la espléndida La bruja, de Robert Eggers, que la situó en el mapa del cine de culto, después fue Casey Cooke, una de las dos chicas secuestradas por el personaje esquizofrénico interpretado por James McCavoy en Múltiple, pero sobre todo cuando fue la protagonista de la serie Gambito de dama para Netflix. El ajedrez la lanzó por completo a la fama y desde entonces no ha parado de hacer películas exitosas (Dune 2) o interesantísimas (El menú).
Ahora, como Furiosa, cumple, pero no es Charlize Theron. El carisma de Charlize, Anya no lo tiene. Es una buena actriz pero aquí le cuesta demostrarlo. Ella lo sabe, desde su presentación en Cannes ha dejado caer su disconformidad con el rodaje, aunque no ha querido meterse en el barro de lo que ha debido ser en realidad. A esto, añadamos que tiene muy pocas líneas de diálogo y las que tiene no son precisamente brillantes. Así como Charlize se merecía una nominación al Oscar que no le llegó, de las 11 que obtuvo la película, no es ése el caso de Anya.
Tampoco el de su compañero de reparto, Chris Hemsworth, la otra estrella protagonista de la cinta y el villano de la función, que está más en modo caricatura que en el de una auténtica interpretación que inquiete y desate el terror entre los espectadores. Su nariz postiza, totalmente incomprensible, tampoco ayuda a que su interpretación resulte memorable.
Furiosa es, por lo tanto, una película exclusivamente para los fans de la saga. Con sus errores y sus aciertos, es un título evento que muchos verán como inferior a Furia en la carretera y otros como la mejor película de acción rodada hasta la fecha. Probablemente no haya consenso hasta que el tiempo la ponga en un lugar más reposado que tras una primera vez en plena efervescencia del estreno. Menos aquellos que no sean fans del universo, que ya tendrán claro que no es una película para ellos.
Silvia García Jerez