Día Mundial de la Salud Mental
Con motivo del Día Mundial de la Salud Mental, que se celebra el 10 de octubre, la fundación Músicos por la Salud quiere visibilizar que la música no solo emociona, sino que también cura y acompaña, especialmente a las personas con enfermedades asociadas a la salud mental. Sus microconciertos en hospitales y centros sociosanitarios contribuyen a mejorar el bienestar emocional de miles de pacientes.
La evidencia científica respalda que la música puede ser una poderosa herramienta terapéutica para reducir síntomas de depresión y ansiedad, mejorar el estado de ánimo y fomentar la conexión social. «La música tiene la capacidad de transformar el ambiente hospitalario. Hemos visto cómo una canción puede aliviar la angustia, reducir el dolor o simplemente devolver la sonrisa a una persona que atraviesa una fase de ansiedad», afirma Guillermo Giner, presidente y fundador de Músicos por la Salud. Los microconciertos diseñados por Músicos por la Salud, con una metodología contrastada gracias a años de trabajo, han demostrado que con sólo quince sesiones se pueden lograr importantes cambios en los pacientes. Las investigaciones demuestran que el estado anímico mejora: un 83% se siente más animado y un 94% más tranquilo. Además, 7 de cada 10 sienten que se ha reducido su ansiedad. Estos datos se desprenden del estudio que la fundación ha realizado con la Fundación Musicoterapia y Salud.Más allá de los datos, comprobar el antes y el después de un microconcierto habla por sí solo.
Asier, un joven paciente de Oncología, recuerda cómo la música le llegó mientras estaba ingresado en la UCI, en estado «muy grave», y fue como si le reconectaran con la vida. «Estaba tumbado en la cama, no podía hacer nada. Cuando cantaban yo intentaba hacerles gestos de que me gustaba, pero ni siquiera sé si fui capaz», explica. «Estás fatal y de repente aparece alguien cantando y rompe todo tu contexto. Creo que hay pocas canciones que haya disfrutado más que esa. Estás creando recuerdos bonitos y esa es la clave, que no vayamos solo a sufrir al hospital. Ojalá que haya más personas que puedan sentir lo que yo sentí en aquel momento», añade.Los microconciertos de Músicos por la Salud no son simples actuaciones para amenizar las estancias: son intervenciones con método para mejorar la salud.
Un estudio realizado por la organización, junto a Culturalink, revela que una intervención musical de dos horas diarias podría suponer un ahorro para un hospital de entre 2.098.390 y 7.457.767 euros al año. El estudio está basado en la revisión exhaustiva de 118 estudios científicos y en datos recogidos por la fundación, donde se exploran los impactos sanitarios, psicológicos y económicos de las intervenciones con música en la UCI de un hospital. La investigación demuestra que la música reduce el estrés y la ansiedad en el paciente, favorece la relajación y mejora del sueño, llevando a una disminución en la duración de la estancia hospitalaria y el uso de recursos como sedantes y ventilación mecánica, lo que supone un ahorro por paciente en las UCI que oscila entre los 4.982 y 17.707 euros.
Estos efectos se producen porque la música puede estimular la liberación de neurotransmisores como dopamina, serotonina y endorfinas, elementos esenciales en la regulación del dolor y el estrés. Además, actúa sobre el sistema nervioso autónomo, contribuyendo a reducir la presión arterial, la frecuencia cardiaca y los niveles de cortisol.Desde su creación en 2015, la organización ha realizado más de 27.000 microconciertos en 65 hospitales y 340 centros sociosanitarios, beneficiando a 560.000 personas en toda España. Músicos por la Salud pide a las administraciones públicas que incluyan este servicio de ayuda a pacientes en los hospitales y centros sociosanitarios de toda España.
Consulta los estudios que avalan la labor de Músicos por la Salud aquí: https://musicosporlasalud.org/por-que-funciona/estudios-e-investigacion/
Conoce la experiencia de Asier aquí: