Charlamos con José Carlos SOMOZA, autor de la novela en la que se basa Musa de J. Balagueró
Musa es una película extraordinaria. Jaume ha hecho una gran labor
José Carlos Somoza, escritor y profesor, tiene numerosos libros publicados pero fue La dama número 13, la que fascinó a Balagueró para llevarla al cine.
Desde La Cronosfera recomendamos poderosamente su lectura.
Rozando la literatura fantástica, de Somoza se desprende siempre cierto auto-conocimiento, tanto tras sus lecturas como en los personajes de sus novelas; quizá por su formación de psiquiatra, que nunca llegó a ejercer.
Experto en Shakespeare, ha preferido contar cuentos e investigar mitos –La caverna de las ideas, Croatoan…– y advertirnos de las musas inspiradoras.
El autor configuró La dama numero 13 entre espectros y rimas, desde Milton y El Paraíso perdido hasta Robert Graves con La diosa blanca.
Y fue Somoza quien primero retorció a esas musas hasta transformarlas en brujas de Macbeth, colocando sus poemas recitados como conjuros entre párrafos y en líneas sueltas, apareciendo en el texto con una seductora presencia plástica; repitiéndose, entre la ensoñación del acto de crear y la realidad, alcanzando ese poder brutal de las palabras y la poesía.
Somoza, amante del cine, está encantado con la adaptación cinematográfica.
Y aunque no cree en las casualidades, durante el estreno de Musa fue el único que se percató de un cartel en una secuencia -donde se lee algo relativo a la memoria-, que sintetiza toda la historia.
Al comentárselo a Jaume, Balagueró tuvo un escalofrío…
La Cronosfera: ¿Cuánto hay de Somoza en Salomón, ese profesor y escritor, protagonista de la historia?
J. C. Somoza: En cada uno de mis personajes hay algo de mí, pero supongo que esto ocurre con todos los autores. De Salomón elegiría su pasión. Yo también me apasiono por todo lo que me gusta.
P: ¿Alguna vez has tenido la sensación de qué las musas terminan el texto, que la historia decide su propio final?
J. C. Somoza: Sí, más de una vez. Creo que esa sensación de que el texto se controla a sí mismo es algo que hemos tenido todos los escritores. Quizá en tiempos remotos se relacionó, en efecto, con la inspiración de las musas.
P: Has estado vinculado desde el principio a la película, colaborando con Jaume y Fernando, pero ¿llegaste a plantearte ser co-guionista, propiamente?
J. C. Somoza: En ningún momento. Siempre he partido de la idea de que la obra que otros quieran hacer con la tuya, no te pertenece. Es otra clase de obra y sus responsables deben saber qué hacer. No quiero tener el control de todo, solo de lo que yo mismo hago. Supongo que por eso soy escritor y no director de cine.
P: ¿Cómo fue la experiencia del cameo, apareciendo en el film?
J. C. Somoza: Muy divertida. Me equivocaba siempre a la hora de detenerme frente a la cámara porque había que hacerlo en un punto concreto del plató. Al final tuvieron que poner a alguien que, agachado, me indicaba donde frenar (risas) Si no… bueno, quizá hubiese salido un plano verdaderamente terrorífico (risas)
P: Acudiste al estreno en Sitges. ¿Qué nos puedes contar, qué recuerdas?
J. C. Somoza: Fílmax me invitó amablemente a la premiere mundial y claro, fui. El ambiente era una pasada. Conocí a Guillermo del Toro y charlé con los actores y actrices de la película, que me parecieron excepcionales.
P: ¿Coincidiste con Susan Sarandon? Esa misma noche proyectaban Rocky Horror Picture Show.
J. C. Somoza: No pude. Aquello es espectacular y había mucha gente.
P: ¿Cuál fue tu primera reacción al verla? ¿Qué te parece el reparto?
J. C. Somoza: Me quedé encantado al verla. Y todos, como ya dije, están muy bien. Eliot Cowan te hace pensar realmente en el hombre atribulado por una pérdida sentimental, que es el núcleo de todo lo que le pasa. Y Ana Ularu está soberbia en su papel de Raquel. Pero es que el resto de actores -Leonor Watling, Manuela Vellés, Christopher Lloyd… ¡no puedo mencionar a todos!- realizaron una magnífica labor.
P: En La dama número 13 hay duelo, depresión, ausencia, obsesión, locura… Escritura sobre arte y el oficio de escribir. ¿Un escritor necesita estar sólo y pasar un infierno para sacar la obra?
J. C. Somoza: No, al contrario, necesita estar en el cielo. El mito de que hay que pasar penalidades para crear es una tontería. Ningún creador, no ya escritor, ningún artista ha podido crear nada interesante viviendo en el infierno… Lo que ocurre es que el verdadero genio logra rodearse de momentos celestiales para crear su obra incluso viviendo en el infierno.
P: En el film hay 3 cambios respecto a la novela, que recomendamos poderosamente; las localizaciones, el número de damas-musas y el final -y no podemos decir más-. El lenguaje fílmico tiene otras maneras pero ¿discutiste esos cambios con Jaume y Fernando?
J. C. Somoza: Fueron muy amables de dejarme leer el guión y luego me reuní con ellos. Les hice algunos comentarios, pero todo estaba decidido ya. Yo no deseaba -como he dicho, no me gusta- adoptar el papel de creador de ese guión. Ellos tenían que hacerlo y crear su propia obra. Sólo les di mi opinión en algunos detalles.
P: ¿De dónde surge El Imago?
J. C. Somoza: Todas las extrañas palabras de la obra son reflejo de antiguas palabras relacionadas con la magia y la brujería. Leí mucho sobre eso cuando escribí la Dama. Filacterias e imagos son palabras latinas que se relacionaban con conjuros, y en este caso, imágenes hechas como modelos de la supuesta víctima, como muñecas vudú.
P: En el libro hay más violencia y la película tiene menos presencia de poesía en castellano.
J. C. Somoza: En la novela hay más poesía en castellano. Creo recordar que cito a Góngora, a Machado, a Dámaso y a Aleixandre, creo que también… Pero a la hora de decidir los poemas, no quise suministrar ninguna idea concreta sobre gustos, preferencias o estética. Solo quería que fuesen autores variados. El único que no podía faltar era, naturalmente, Shakespeare. Como anécdota te diré que el muy añorado Roberto Bolaño, que me presentó encantado la novela en Barcelona, me reprochaba que hubiese citado a Dámaso entre los poetas de la obra…
La Cronosfera: Maravilloso Bolaño… Y para ti, José Carlos, ¿Qué versos te inspiran?
J. C. Somoza: Los de William Shakespeare; la cima de la literatura, en mi humilde opinión.
Nos despedimos de Somoza haciendo caso a sus sabias palabras y recordando aquello que se decía en los ’80: ¡Si quieres aventuras, lánzate a la lectura!
Así que disfruten del libro y la película.
Mariló C. Calvo