AGÁRRALO COMO PUEDAS: El Frank Drebin de Liam Neeson
A Frank Drebin lo conocimos en el cine en 1988 en el Agárralo como puedas que protagonizó Leslie Nielsen, actor canadiense que se hizo muy popular gracias a las comedias surrealistas que en los años 80 y 90 nos regaló aquel trío tan creativo que fueron los ZAZ (David Zucker, Jim Abrahams y Jerry Zucker), dos hermanos y un amigo de la infancia que se dedicaron a realizar historias en forma de parodias –Top Secret lo era de las películas de espías de la II Guerra Mundial- y llenas de chistes visuales, o gags, algunos de los cuales rompían la cuarta pared -ese recurso, normalmente cómico, en el que el actor mira a la cámara e interpela directamente al público de la sala-. Un trío que fue mítico, que hoy sigue siendo un referente, y no es para menos, ya que nos dio obras maestras como la ya citada película de espías, como Aterriza como puedas y su secuela o como la serie de televisión Escuadrón de policía (1982), la presentación al mundo de Frank Drebin previa a su llegada a la gran pantalla con Agárralo como puedas (1988) y sus dos continuaciones, protagonizadas las tres por Leslie Nielsen, con el que ya trabajaron en 1980 en la cinta parodia de catástrofes aéreas, tan habituales en los 70, en la que Nielsen interpretaba un papel muy secundario.
Agárralo como puedas suponía una parodia del cine de policías, que también tuvo su representación en Loca Academia de Policía un poco más tarde, en 1984, un subgénero de comedias que dieron años gloriosos a la taquilla y que aún se recuerdan como hitos bastante difíciles no ya de superar, de igualar. Pero en 2025, cuando creíamos que la fiebre de los remakes que invade Hollywood no podría proporcionarnos un nuevo Agárralo como puedas que saliera bien parado… hemos comprobado cómo sí es posible disponer de una versión actualizada de la película original al mismo nivel que su antecesora. Algo, claro está, digno de celebrar.
De qué va en este caso eso poco importa. No vamos a ver Agárralo como puedas por la historia, aunque la tenga, tan consistente o tan endeble como en la ya conocida, lo que importa, aquí y en aquella, son, eran los gags, la cantidad de ellos por segundo que sus creadores son, eran, capaces de ofrecer. Chistes visuales en primer plano y en segundo, porque en el fondo de la comisaría, de la calle o de la localización que tocase también pasan cosas locas. Hay que estar atento a todas las capas del plano para no perderse nada. Y a eso a lo que vamos, a reírnos con los momentos menos lógicos del caso al que Frank Drebin tenga que enfrentarse.
En esta, tenemos que admitir que lo conseguimos. Reírnos, sí, pero sobre todo admirar el nivel creativo de sus nuevos autores, Akiva Schaffer en la dirección y compartiendo el guión con Dan Gregor y Doug Mand. Un nuevo equipo que parece el de siempre. Es como si los ZAZ se hubieran hecho cargo de ella, porque este trío que ahora firma el proyecto retorna al espíritu del anterior y recrea la atmósfera que tenían sus películas. Los gags, ni uno solo repetido de la cinta clásica, parecen genuinos de sus padres originales, como si fueran una continuación de los que vimos en los 80. Y eso es muy difícil de conseguir. Estar a la altura de los ZAZ es algo a lo que muy pocos pueden aspirar.
En el Agárralo como puedas de 2025 encontramos muchísimos. Algunos evidentes, con los vasos de café que la Policía parece tener siempre en la mano, y otros no tanto, pero igual de ingeniosos. Hay momentos en los que la cantidad decae, pero también lo hacía en la original. Aunque no por mucho tiempo en ninguna de las dos. Es, como decimos, un goteo bastante continuo de chistes visuales, además de los de guión. Diálogos en los que la literalidad genera la carcajada. O gracias a la vis cómica de los actores, sobre todo la de Pamela Anderson, que tiene momentos muy brillantes y los sabe aprovechar.
Liam Neeson, actor de registro habitualmente rudo, lo cambia por completo, aunque no su hierático rostro, ese permanece intacto, y también cumple con su imposible cometido: que no nos acordemos de Leslie Nielsen. Lo cierto es que ya desde su presentación nos hace saber que su personaje, Frank Drebin Jr., es hijo del mítico policía desastroso y torpón que todos conocimos. De ahí partimos y la explicación nos vale. Una nueva generación de Drebins ha llegado, por suerte o por desgracia para el Cuerpo. Desde luego por suerte para nosotros.
Ambos, Liam y Pamela, funcionan bien como pareja. La promoción del film está haciendo mucho hincapié en el hecho de que son pareja desde el rodaje. Y claro, ese salseo añade un morbo especial a la película, ya que el pasado personal de los dos actores es muy particular y nada tiene que ver el de uno con el de la otra. A Liam Neeson, recordemos, que se le murió su esposa, la también actriz Natasha Richardson, en 2009 días después de un trágico accidente de esquí, y Pamela tuvo una relación muy sórdida con el roquero Tommy Lee, con el que pasó unos años de oscuridad que incluyeron drogas y acusaciones de violencia doméstica en los años 90, en la cúspide de su fama por la serie Los vigilantes de la playa.
Así que esta inesperada unión ha pillado al mundo por sorpresa. Pero el mundo también la ha recibido con simpatía. Que un hombre con ese trágico pasado sentimental y una mujer con su mochila correspondiente se hayan enamorado cuando los dos pasan una etapa muy distinta de aquella, es siempre algo que llena de alegría a los fans. Se lo merecen los dos, han comentado en las redes sociales. Y quién no lo merecería, pero en este caso es bonito, sí. Otra cosa es que sea real… y no parte de la publicidad de la película. Si es real, bienvenido sea. Y a la película, ya de paso, le viene estupendamente.
Pero la química entre ellos no es mayor que la que desprendían Leslie Nielsen y Priscilla Presley. Funciona pero de no saber que son pareja serían una más. Tampoco es malo eso, porque como espectadores es lo que le pedimos a la ficción. Y lo cierto es que sus escenas juntos están muy divertidos, con eso nos conformamos.
Lo que sí llama la atención, por encima de cualquier otro aspecto del Agárralo como puedas actual es lo mucho que se parece a lo que los ZAZ hubieran hecho entonces. Eso sí que es brillante. Hasta en la estética cutre ochentera de cine de serie B. A quien no conociera las originales le parecerá que su aspecto visual puede estar mal cuidado pero es que se trata de una copia exacta de lo que sus creadores originales hacían en aquella época. Hasta los gags zafios y ordinarios están presentes. No es casualidad que veamos chistes sexuales tan burdos, para los ZAZ eran un elemento cómico más, y que la nueva versión también nos traiga esa parte gamberra de su cine es otro acierto de la película.
Agárralo como puedas versión 2025 es una gozada, una película divertida y llena de ingenio dispuesta a que el espectador se lo pase en grande. Tiene todos los ingredientes para conseguirlo, para no errar el tiro y llevar a buen puerto un proyecto en el que teníamos nuestras reticencias pero han sido vencidas con éxito gracias a un nuevo equipo rebosante de creatividad para darnos una de las mejores comedias de este verano.
Silvia García Jerez